El Consejo de la Unión Europea ha adoptado un paquete de reglas para fortalecer la lucha contra el lavado de dinero y la financiación del terrorismo. Estas nuevas medidas buscan mejorar la supervisión y la coordinación entre los estados miembros, así como incrementar la transparencia en las transacciones financieras. Las reglas, que entrarán en vigor dentro de tres años, establecen sanciones más severas para quienes violen estas normativas. El objetivo es proteger la integridad del sistema financiero de la UE y asegurar un entorno económico seguro y estable. Las autoridades subrayan la importancia de una mejor supervisión y coordinación, además de implementar medidas para un seguimiento más estricto de las operaciones sospechosas. Las sanciones más duras buscan disuadir actividades ilegales y salvaguardar el sistema financiero. Estas medidas son vistas como esenciales para mantener la confianza en el sistema financiero europeo y prevenir la criminalidad financiera.